El ozono posee mecanismos a través de los cuales ejerce efectos terapéuticos lo que explica por qué mejora la oxigenación en el organismo, contribuyendo a erradicar productos tóxicos que se generan en el funcionamiento celular y regula los mecanismos de defensa inmunológicos del organismo, también como inmunomodulador, aplicable en enfermedades autoinmunes.
Este gas posee la capacidad de estimular la generación de los tejidos, favoreciendo la cicatrización de heridas y lesiones de la piel y ha mostrado efectos muy positivos en la recuperación funcional de pacientes afectados por enfermedades degenerativas del sistema nervioso, así como por secuelas de procesos isquémicos, estimulantes y otros que son beneficiosos para la salud.
Recuerda que tratamos algunos trastornos del sistema nervioso ocupándonos de la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación con ozono.